El Día Internacional de la Mujer trabajadora se ha convertido en una fundamental dentro de las luchas populares; a fuerza de masivas convocatorias, potentes denuncias, capacidad de articulación y organización, el movimiento de mujeres es uno de los movimientos sociales con mayor protagonismo en los últimos años. Este 8M nuevamente se espera una masiva convocatoria para la marcha que partirá a las 16 horas desde la Plaza de la Democracia hasta la Costanera de Asunción.
Parte de este enorme colectivo que congrega a diversas corrientes del feminismo, son las mujeres campesinas e indígenas; ellas traen sus saberes y experiencias de lucha sumando su voz en la denuncia contra un sistema “patriarcal y explotador” así lo señala Alicia Amarilla, dirigente de la Organización de Mujeres Campesinas e Indígenas CONAMURI. Este año la movilización estará encabezada por las mujeres indígenas, “es una reivindicación necesaria, durante siglos han soportado la explotación y la violencia del sistema; son las que sufren el criadazgo una de las formas más duras de explotación, las que hoy están sufriendo las formas más crueles de violencia” señala Alicia y asegura que es una deuda histórica la reivindicación de la mujer indígena.
Para las mujeres campesinas, las plenarias de preparación para las jornadas de movilización feminista son un lugar de intercambio de experiencias, de debate y de construcción colectiva de conciencia respecto al carácter del movimiento, “un movimiento que luche por la liberación y la emancipación de las mujeres en todo el mundo; un movimiento que luche contra el sistema explotador” afirma Alicia. “Insistimos, nuestro trabajo vale” es la consigna de esta jornada de movilización que busca llamar la atención sobre las formas de explotación que sufren las mujeres en un sistema económico que no las reconoce y que recarga sobre sus hombros dobles y triples jornadas de trabajo, en muchos casos no remunerado.
Al hablar de los reclamos de las mujeres rurales Alicia describe lo que acontece en el campo actualmente, el modelo de agronegocios avanza las primeras afectadas son las mujeres, aunque son también quienes están en la primera línea de lucha para resistir en sus territorios, “rechazamos la criminalización que sufrimos por denunciar los abusos del Estado y el atropello criminal por defender nuestras comunidades de las fumigaciones y el avance del monocultivo transgénico que arrasa con todo” dice.
Ante esta realidad las mujeres del campo insisten en levantar una histórica consigna del movimiento campesino la Reforma Agraria “es necesaria y urgente una Reforma Agraria Popular que garantice el acceso a los derechos de tierra y territorio para las comunidades campesinas e indígenas y, con ello, el alcance de una vida digna, especialmente, para las mujeres del campo” indica la dirigente. El modelo alternativo que reivindican es la defensa de la soberanía alimentaria, de las semillas nativas y criollas y la producción agroecológica, un modelo de producción donde el aporte de la mujer campesina sea visibilizado.
Cientos de mujeres del campo llegarán hasta Asunción este 8 de Marzo para hacer oír su voz; el reclamo de tierra, territorio y el fin de la violencia que produce el modelo de agronegocios contra las mujeres rurales será una reivindicación central en esta jornada que se prevé sea, nuevamente, multitudinaria.