La emergencia que se vive debe servir para que se priorice las políticas a favor de la Agricultura Familiar Indígena y los derechos de los pueblos indígenas, cuyo modo de vida es la solución a muchos de los problemas que enfrentamos en el mundo.
Es fundamental que tengamos un tejido agrícola y ganadero importante en nuestra sociedad que nos permita enfrentar con mayor resiliencia cualquier crisis, incluida la que estamos atravesando ahora”, manfiesta Antolín Huáscar de la Confederación Nacional Agraria (CNA).
Y es que en tiempos del coronavirus la Agricultura Familiar (AF), un sector históricamente maltratado, olvidado y excluido, se convierte en una pieza importante para garantizar la seguridad y soberanía alimentaria del país.
Y es que “sin comida, el mundo no existe”.
De acuerdo con la Confederación Nacional Agraria (CNA), gremio representativo del agro nacional, el trabajo de los hombres y las mujeres del campo resulta vital para sostener al país; y es que “sin comida, el mundo no existe”.
Precisamente, el Plan Nacional de Agricultura Familiar 2019-2021 indica que la AF provee el 70 por ciento de los alimentos en el mundo y en el Perú representa el 97 por ciento del total de las unidades agropecuarias.
Además, más del 83 por ciento de los trabajadores agrícolas realizan AF.
Pese a su importancia en el mundo, la AF continúa desvalorada argumenta Lucinda Quispe Alaya, representante de la Federación Agraria Región Junín (FAREJ).
“Nuestros productos no tienen un valor real, por ejemplo la papa nos compran a 30 o 50 céntimos el kilo, pero ese mismo kilo lo venden a un sol o tres soles” indica Lucinda Quispe.
Asimismo, agrega que en nombre de la pobreza se ha impuesto un modelo económico donde el libre mercado genera más pobreza.
“Con la actual crisis el precio se ha disparado aún más. Este mercado no reconoce el verdadero costo de producción de nuestros productos, descapitalizando así nuestra escasa economía”, puntualizó Quispe Alaya.
Un llamado al MINAGRI y otros sectores
Por su lado, Antolín Huáscar, a través de las plataformas institucionales de la CNA, hizo un llamado al Ministerio de Agricultura (MINAGRI) para garantizar la producción y el abastecimiento de los productos en condiciones de equidad, priorizando sobre todo la salud e integridad de los agricultores y del campo.
“Desde la CNA y nuestras federaciones regionales pedimos al Gobierno evitar pérdidas en nuestras chacras y en la producción agropecuaria en general en un momento tan crítico como el que estamos afrontando”, manifestó Huáscar.
El llamado incluye medidas urgentes para que la Policía nacional y las Fuerzas Armadas garanticen la ágil circulación de los productos hacia los mercados de abasto, a fin de evitar una carencia de alimentos y la especulación.
Los agricultores y agricultoras, con no poco esfuerzo, le están asegurando a la población los mismos precios para sus productos.
El representante de la CNA indicó además que “los agricultores y agricultoras, con no poco esfuerzo, le están asegurando a la población los mismos precios para sus productos".
"Bien haría el Ejecutivo en adquirir directamente a los pequeños agricultores su producción para destinarla rápidamente a los hogares más necesitados, en lugar de distribuir un dinero que quizá no sea destinado para su seguridad alimentaria” agregó.
Finalmente, exigió al MINAGRI, al MINSA y a los Gobiernos Regionales una constante supervisión en el ámbito rural para evitar que los agricultores sean víctimas del coronavirus como consecuencia de su sacrificada labor, y para evitar el brote de plagas agrícolas.
“Que esta experiencia sirva para que se priorice políticas a favor de la Agricultura Familiar Indígena y los derechos de los pueblos indígenas, cuyo modo de vida es la solución a los problemas alimentarios”, puntualizó Huáscar.
Fuente: Con información de CNA: https://www.cna.org.pe/