Por Nieves Zúñiga, revisado por Dayma Echevarría, profesora del Centro de Estudios de la Economía Cubana de la Universidad de la Habana
Cuba está situada en el mar Caribe y tiene una superficie de 109.884 km2 que incluye la isla de Cuba, la isla de la Juventud y los cayos adyacentes. Según datos oficiales de 2021, en el archipiélago cubano viven 11.089.511 personas,1 lo que muestra muy poco crecimiento en comparación con la población en los últimos años (11.163.934 en 2012).2 Este hecho sorprende a los expertos que lo explican por las dificultades económicas sostenidas en el tiempo que han llevado a una baja natalidad y por la emigración -se estima que en 25 años han emigrado casi un millón de cubanos-.3
Desde la Revolución, la propiedad estatal ha sido la que más superficie de tierra ha ocupado a pesar de un importante descenso desde 1982, cuando el Estado poseía el 82% de la tierra, a 1999 cuando descendió a algo más del 53%.
Tabacalera, El Palmarito, Vinales, Cuba. Foto de Annie Mole, Atribución Flickr (CC BY 2.0)
La situación económica de Cuba se ha visto afectada significativamente por la historia política del país con hitos como la Revolución Cubana de 1959, el modelo socialista instaurado desde entonces, el embargo de Estados Unidos contra el país en el marco de la Guerra Fría y la caída de la Unión Soviética.
Desde la caída de la Unión Soviética, la economía cubana vive una situación difícil que se ha recrudecido en el último tiempo debido a las consecuencias de la pandemia del Covid, el endurecimiento de las sanciones estadounidenses durante el gobierno de Donald Trump y los errores en las políticas monetarias y económicas internas.4 A la falta de productos básicos como alimentos y medicinas, los apagones y la fuerte inflación se suma ahora la escasez de combustible.
La estructura agraria cubana ha estado dominada por grandes empresas con trabajadores asalariados primero bajo dominio privado y tras la Revolución bajo dominio estatal.5 La propiedad estatal y colectiva bajo control estatal han sido las formas dominantes de la propiedad de la tierra. Las largas extensiones de tierras ociosas y el embargo explican una baja productividad agrícola, el deterioro de la calidad de los suelos, la tecnología obsoleta, la falta de insumos, la creciente escasez de mano de obra y una alta necesidad de importar bienes.6 De hecho, desde 2008, desarrollar y aumentar la producción agrícola a través del reparto de tierras estatales y ociosas en usufructo ha sido una prioridad para el gobierno cubano dada la importante carga financiera que supone que Cuba importe el 80% de lo consume (2.000 millones de dólares en 2014). 7
San Pedro del Morro Castle, Cuba. Foto: Adam Jones, Flickr, CC BY 2.0
Contexto histórico
Tras la independencia de España en 1901, Cuba consolidó su relación económica con Estados Unidos lo que llevó a una importante presencia de capital estadounidense en la actividad económica de la isla. La economía se basó principalmente en plantaciones agrícolas y en la extracción de materias primas para la exportación a Estados Unidos. Este modelo económico generó un desequilibrio estructural caracterizado por el desabastecimiento alimentario nacional y la necesidad de importar los bienes básicos.
En 1959, el triunfo de la Revolución Cubana, liderada por Fidel Castro, el Che Guevara y Camilo Cienfuegos entre otros, y motivada en parte por la corrupción y el enriquecimiento de la oligarquía, acabó con la dictadura militar de Fulgencio Batista, en el poder desde 1952. La toma de poder por Fidel Castro -en el gobierno desde diciembre de 1959 hasta febrero de 2008- implicó el establecimiento de un sistema socialista y el estrechamiento de la relación de Cuba con la Unión Soviética en un contexto internacional caracterizado por el enfrentamiento entre Estados Unidos y la Unión Soviética.
Tras la Revolución Cubana, la mayor parte de la tierra pasó a ser propiedad del Estado. A través de las reformas agrarias en 1959 y 1963 se confiscaron los latifundios y las empresas estadounidenses y cubanas para convertirse en explotaciones estatales a gran escala. La respuesta de Estados Unidos a dichas acciones fueron la reducción de las importaciones de productos cubanos y el embargo económico, comercial y financiero contra Cuba. 8
La gestión de la tierra por parte del Estado ha dominado la gobernanza de la tierra en Cuba desde entonces. Según algunos autores, las reformas agrarias en Cuba no resultaron en un reparto más equitativo de la tierra, sino en un traspaso de poder de una estructura agraria dominada por grandes empresas privadas con trabajadores asalariados a la misma estructura pero esta vez bajo el control estatal.9 Durante este tiempo se fomentaron estructuras de producción colectiva como las Cooperativas de Producción Agropecuaria (CPA). En los años 90, coincidiendo con la desaparición de la Unión Soviética, el agotamiento del modelo y el incremento de la demanda de tierra, se impulsó la distribución de la tierra. Parte de las empresas estatales se convirtieron en Unidades Básicas de Producción Cooperativa (UBPC) y hubo apropiación de tierras de empresas estatales multiplicándose la tenencia precaria.10 A partir de 2008 se amplió la entrega de grandes cantidades de tierras ociosas en usufructo a pequeños productores, fenómeno que había empezado a pequeña escala en los años 80 con los productores de tabaco. Pero no sería hasta la reforma de la Constitución en 2019 cuando la apertura al mercado y a la inversión extranjera del país fue acompañada del reconocimiento explícito de la propiedad privada.
Ministerio del Interior con imagen del Che Guevara, La Habana, foto de Nicolas de Camaret, Flickr, CC BY 2.0
Legislación sobre tierra
La Constitución de Cuba de 2019 supone la concreción de un modelo socieconómico reformado para el país que cimenta el socialismo como sistema y ratifica al Partido Comunista de Cuba como fuerza política dirigente superior, y mantiene abierta de manera controlada su economía al mercado y a la inversión extranjera.
Una de las principales reformas introducidas por la Constitución de 2019 es el reconocimiento explícito de la propiedad privada. En la Constitución anterior, de 1976, se reconocía la propiedad socialista de todo el pueblo como la base del sistema económico. Lo más parecido a la propiedad privada era el reconocimiento de la propiedad de los agricultores pequeños sobre las tierras que legalmente les pertenecen. Estos sólo podían venderlas, permutarlas o transmitirlas por otro título al Estado y a cooperativas de producción agropecuaria o a agricultores pequeños según la ley (art. 19).12En la Constitución de 2019, se reconoce la propiedad privada sobre la tierra a personas naturales o jurídicas cubanas o extranjeras, pero con restricciones como la prohibición del arrendamiento, aparcería y los préstamos hipotecarios a particulares (art. 29). 13
A partir del 2008, la legislación cubana sobre la tierra se ha centrado principalmente en el reparto de tierras ociosas en usufructo, dada la gran cantidad de tierra en manos del Estado y en respuesta a la necesidad de desarrollar la producción y comercialización agrícola. Este reparto no transforma la propiedad de la tierra, que sigue siendo del Estado, sino su gestión. Ese mismo año, el Decreto Ley 259 permite la entrega de tierras ociosas en usufructo a productores individuales, a las cooperativas y a otras instituciones por 10 años renovables para utilizarse para la producción agropecuaria en conformidad con la aptitud de uso del suelo.14 Según el Decreto, el Estado puede poner fin al contrato de usufructo por inactividad productiva durante seis meses, por la no utilización racional y sostenible de las tierras, o por incumplimiento continuado de la producción contratada, entre otras razones. La extensión máxima a entregar para personas naturales sin tierras es 13,42 hectáreas y para quienes posean tierras, en propiedad o usufructo, podrán ampliarlas hasta un máximo de 40,26 hectáreas.15
En 2012, el Decreto Ley 300 incrementó la extensión máxima de tierras en usufructo a 67,10 hectáreas para las personas naturales que estén vinculadas a una Granja Estatal con personalidad jurídica, Unidad Básica de Producción Cooperativa (UBPC) o Cooperativa de Producción Agropecuaria (CPA) siempre que sean colindantes o a un máximo de cinco kilómetros.16 Un año más tarde, el Decreto Ley 311 amplió los sujetos beneficiarios de este incremento a personas naturales vinculadas a las Cooperativas de Créditos y Servicios (CCS). 17
En 2017, el gobierno cubano anunció la introducción de modificaciones a la política de entrega en usufructo de tierras estatales como, por ejemplo, la autorización a las personas naturales con tierras en usufructo que se vinculen e integren a empresas agropecuarias, azucareras o forestales, y se extiende la vigencia del usufructo para personas naturales de 10 a 20 años.18 Dichas modificaciones se concretarían en la Ley 358 de 2018.19
Como fruto de estos cambios en la legislación, desde 2008 hasta 2020 se entregaron en usufructo más de 2,5 millones de hectáreas a 291.386 usufructuarios. 20
Tenencia de la tierra
La Constitución de 2019 reconoce los siguientes tipos de propiedad (art. 22): 1) socialista de todo el pueblo, actuando el Estado en representación y beneficio del pueblo; 2) cooperativa, sustentada en el trabajo colectivo de los socios y en el cooperativismo; 3) de las organizaciones políticas, de masas y sociales, sobre los bienes destinados al cumplimiento de sus fines; 4) privada, por personas naturales o jurídicas, cubanas o extranjeras; 5) mixta; 6) de instituciones y formas asociativas, sobre bienes con fines de carácter no lucrativa; 7) personal, sobre bienes que, sin constituir medios de producción, contribuyen a la satisfacción de las necesidades materiales y espirituales del titular.21
Las tierras que no pertenecen a particulares o cooperativas, el subsuelo, los yacimientos minerales, las minas, los bosques, las aguas, las playas, las vías de comunicación y los recursos naturales tanto vivos como no vivos dentro de la zona económica exclusiva del país son constitucionalmente de “propiedad socialista de todo el pueblo”. Estos bienes no pueden transmitirse en propiedad a personas naturales o jurídicas y son inalienables, imprescriptibles e inembargables (art. 22).
La propiedad privada de la tierra se regula por un régimen especial de acuerdo a la Constitución. El arrendamiento, la aparcería y los préstamos hipotecarios a particulares están prohibidos. La compraventa o trasmisión onerosa de la tierra en régimen de propiedad privada solo podrá realizarse según los requisitos legales y sin prejuicio del derecho preferente del Estado a su adquisición. La concentración de la propiedad en personas naturales o jurídicas no estatales también es regulada por el Estado en base a los principios socialistas de equidad y justicia social (art. 30).
Desde la Revolución, la propiedad estatal ha sido la que más superficie de tierra ha ocupado a pesar de un importante descenso desde 1982, cuando el Estado poseía el 82% de la tierra, a 1999 cuando descendió a algo más del 53% (ref. 2017 cambios). Tras la propiedad estatal, hasta la reforma constitucional de 2019, se ha dado prioridad a formas de tenencia que promueven el cooperativismo en el sector agrícola como las Cooperativas de Producción Agropecuaria (CPA), las Unidades Básicas de Producción Cooperativa (UBPC) y las Cooperativas de Crédito y Servicios (CCS).
En el Decreto Ley 365 (2018), que actualiza la Ley 95 (2002), las CPA se definen como constituidas por agricultores pequeños que voluntariamente deciden aportar la tierra u otros bienes de su propiedad al patrimonio de la cooperativa que, una vez creada, puede recibir tierras en usufructo (art. 6).22 La misma ley define las CCSs como asociaciones voluntarias de los agricultores pequeños que mantienen la propiedad o el usufructo de sus respectivas tierras y demás bienes, así como sobre la producción que obtienen (art. 7.1). Mediante esta forma de cooperación los campesinos participan de acciones conjuntas como recibir ayuda técnica, hacer trámites legales y gestionar créditos, entre otros. Aunque de adscripción voluntaria, cuando se crearon en los años 60, un gran número de campesinos se adhirieron a ellas porque era una forma de obtener créditos, apoyo técnico y recursos como fertilizantes, semillas, entre otros.23Algunos estudios las definen como las estructuras más productivas del país pero también señalan un nivel mínimo de cooperación y problemas como la corrupción en su interior.24
Las UBPCs se constituyen por la incorporación voluntaria de personas naturales que aportan su trabajo o los bienes que poseen, reciben la tierra en usufructo, e integran su patrimonio los bienes adquiridos por compraventa o cualquier otro título, así como los obtenidos por el resultado de los procesos productivos que desarrollen (art. 5).25 En los años 90 parte de las empresas estatales se transformaron en UBPCs con el objetivo de proveer mayor dinamismo al sector agrícola. Sin embargo, algunos autores señalan que en la práctica dichas unidades han seguido dependiendo en gran medida del Estado ya que deben vender el 70% de su producción a la empresa estatal Acopio a precios inferiores a los del mercado libre lo que genera dificultades para cubrir los costos.26 Su dependencia del Estado también está en adquirir insumos y equipamiento a través de asignaciones, por la imposibilidad de adquirirlos en un mercado libre.27
En la actualidad, según datos oficiales, el 76% de la superficie agrícola es propiedad estatal, el 14% es propiedad de agricultores pequeños y el 7% de propiedad cooperativa.28 La mayoría de la tenencia de la tierra entre personas naturales es como usufructuarios (68,2%), seguido por los propietarios (24,1%), dispersos (7,4%) y arrendatarios (0,3%). 29
Viñales, Cuba, foto de Adam Jones, Flickr, CC BY 2.0
Tendencias en el uso de la tierra
Según datos oficiales de 2017, más de la mitad (57,3%) de la superficie total de Cuba es agrícola y tiene una extensión de 6.300 millones de hectáreas, ligeramente inferior a 2013 (6.342 millones de hectáreas).30 Del total de la superficie agrícola, la superficie cultivada es menor (49%) que la no cultivada y el 27% es gestionada por el Estado, el 32% por privados y el 41% por cooperativas.31 Esta diversificación en la gestión de las tierras agrícolas responde a la necesidad de aumentar la superficie agrícola cultivada, a las pérdidas del sector agropecuario debido a eventos meteorológicos extremos y al cambio climático, y en general, a la baja productividad y la elevada dependencia de las importaciones con las consiguientes desafíos para la seguridad alimentaria en Cuba. 32
Las tierras agrícolas se dividen en cuatro categorías de acuerdo con su productividad. Las tierras de categorías IV y III son las menos productivas y constituyen el 76,8%. Estas tierras se sitúan principalmente en la región oriental del país. Las tierras de categorías I y II son de mayor productividad, constituyen el 23,2% de la superficie agrícola y se encuentran mayormente en las regiones occidental y central.33 Otras fuentes defienden que los suelos muy productivos y productivos ascienden a 16% y 17% respectivamente y los medianamente y poco productivos ocupan el 21% y el 46% respectivamente. 34
El mejoramiento del suelo es uno de los objetivos del gobierno cubano a través del Programa Nacional de Conservación y Mejoramiento de Suelos que para 2030 aspira a alcanzar un área beneficiada del 60% de la superficie cultivada total.35 Según datos oficiales, el 71% de la superficie nacional está afectada por la erosión, lo que impacta directamente en la capacidad productiva del suelo, además de otros problemas como la salinidad, la compactación y la acidez.36 En respuesta a esta situación, el Decreto Ley 50, en vigor desde 2022, regula las actividades de conservación, mejoramiento, manejo sostenible y el uso de fertilizantes en suelos agropecuarios y forestales. Dicha norma aumenta el número de conductas infractoras (de 9 a 30) y las cuantías de multas y sanciones. La norma se aplica tanto a los propietarios como a todos los actores vinculados al uso de los suelos para actividades agropecuarias y forestales. Y establece obligaciones en relación con la fertilidad de los suelos, la nutrición de los cultivos y la institucionalización de un registro central de fertilizantes para la inscripción, el control y la comercialización de estos productos. 37
Según datos independientes, en 2020, el cultivo agrícola de mayor volumen de producción fue la caña de azúcar (71,8%) seguido de lejos por las hortalizas (4.1%), la yuca (3.4%) y los plátanos (3.1%).38 Excepto en el caso de la caña de azúcar, no existe una correspondencia entre los cultivos de mayor producción y los que ocuparon mayor superficie: caña de azúcar (27,7%), maíz (11,1%), arroz (6,5%) y frijoles (6.3%). 39
Dentro de la superficie cultivada se incluye la dedicada a la ganadería para la que, en 2020, se utilizaron 3.694.804 hectáreas.40 Datos de 2022 indican que del total de la ganadería bovina del país (3.645.000 cabezas), el 80% está en manos de productores individuales y el 10.8% es del sector estatal.41 En el último tiempo, el sector ganadero ha tenido que hacer frente a desafíos como el robo y el sacrificio ilegal del ganado vacuno y equino. Una de las zonas especialmente afectada es la provincia de Villa Clara, donde entre enero y marzo de 2023 se ejecutaron ilegalmente 4.835 cabezas de ganado (2.893 vacuno y 1.942 equino) para luego vender la carne en el mercado informal. Estas cifras representan más del doble de lo ocurrido durante el mismo periodo el año anterior lo que muestra un agravamiento de un problema que afecta tanto a ganaderos privados como a empresas ganaderas estatales. 42
La superficie de tierra no cultivada incluye los pastos naturales (2.617 millones de hectáreas) y la tierra ociosa (917.000 hectáreas). En 2014 el gobierno entregó más de un millón y medio de hectáreas ociosas en usufructo para uso agrícola, ganadero o forestal.43 Datos de ese mismo año indican que la provincia con mayor cantidad de tierra ociosa era Camagüey con casi 324.000 hectáreas.44 Si bien, en general, la superficie de tierras ociosas ha tendido a reducirse, en Ciego de Ávila y en Guantánamo aumentaron ese año a ligeramente más de 100.000 y 15.000 hectáreas respectivamente.45 La propiedad de la tierra ociosa es diversa. Por ejemplo, en 2014, el 55% del más del millón de hectáreas ociosas estaba en manos de empresas agrícolas estatales y 24% pertenecían a las cooperativas usufructuarias Unidades Básicas de Producción Agropecuaria.46
La superficie forestal ha tendido a aumentar desde 1990 -cuando ocupaba el 18,7% del territorio- llegando al 31% (alrededor de 3.339 millones de hectáreas) en 2018.47 Los bosques en Cuba se clasifican en bosques productores, bosques protectores de aguas y suelos, y bosques de conservación (para la protección de la fauna y para actividades de ocio y científicas).48
Parte de la superficie de Cuba se dedica a la conservación y uso sostenible de la diversidad biológica y de los recursos naturales a través de las áreas protegidas (terrestres y marinas). No se han encontrado cifras oficiales disponibles online sobre la superficie que ocupan las áreas protegidas en Cuba y fuentes no oficiales ofrecen cifras tan dispares como 6,75% (en 2021)49 y 21% (en 2019)50 . En 2019 había registradas 211 áreas protegidas con diferentes status: 103 aprobadas, 108 sin aprobar, 120 administradas, 91 sin administrar, 77 consideradas de significación nacional y 134 consideradas de significación local. 51
Respecto al área urbana en Cuba, cifras del Banco Mundial de 2015 la sitúan en 3.053 km2, suponiendo un incremento respecto a los 2.749 km2 en el año 2000.52
Hojas de tabaco secando en Viñales, foto de Reinhardt König, Flickr, CC BY-NC-ND 2.0
Inversiones y adquisiciones de tierra
El modelo socialista y el control del Estado sobre la tierra imperante en Cuba desde la Revolución explican en gran parte la escasez de inversiones privadas en tierra en el país. En las últimas décadas, los problemas económicos en el país facilitaron que el gobierno apoyara inversiones en el sector turístico considerado como importante fuente de divisas. El reconocimiento de La Habana como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, las playas y la historia y cultura cubanas son atractivo turístico y tanto el gobierno como inversores extranjeros han invertido en desarrollar el sector turístico en el país a pesar de la ausencia de un mercado formal del suelo.53 Una de las maneras seguidas por el gobierno cubano ha sido utilizar el suelo como su contribución capital en asociaciones con promotores internacionales. Un ejemplo de ello es la asociación entre el gobierno cubano y la empresa canadiense VanCuba Holdings S. A para la construcción de once hoteles, en la que la participación cubana del 50% consistió en la aportación del suelo. 54
Otro mecanismo utilizado por el gobierno cubano de manera extensa ha sido el arriendo de tierras para proyectos comerciales, ya que la venta directa de tierra estatal solo ha sido posible en ocasiones muy especiales. Estos alquileres se establecen por 25 años previo acuerdo entre las partes.55 Una tercera modalidad ha sido el alquiler directo en tierras estatales en zonas francas. Para el año 2000, unas 120 empresas privadas extranjeras y públicas-privadas se establecieron en zonas comerciales de La Habana siguiendo esta modalidad. 56
Datos de la Organización Mundial del Turismo sobre la disponibilidad de hoteles y establecimientos similares pueden dar una idea del tamaño de las inversiones en el sector turístico: en 2021 existe el número más bajo de dichos alojamientos desde 1995 (339.000), un número significativamente inferior a los 450.000 de 2011.57 Estos datos contradicen el crecimiento de camas para el turismo durante los mismos años (103.224 en 2011 y 106.890 en 2021).58La autorización a las ofertas de alojamiento en casas particulares dada en 201959 por el gobierno cubano podría explicar en parte esta contradicción, aunque no existen evidencias de si esta medida tuvo un impacto en las inversiones en tierra para el sector turístico.
El restablecimiento de las relaciones diplomáticas con Estados Unidos en 2015 permitió las visitas de estadounidenses al país, hasta ese momento prohibidas, con la excepción de los cubano-estadounidenses, lo que inyectó de optimismo a los inversores en el sector. Dicho optimismo no duraría mucho ya que la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos en 2017 implicó el recrudecimiento del bloqueo contra Cuba. 60
Desde la apertura de Cuba al mercado, la inversión extranjera en la agricultura cubana ha aumentado. Según el gobierno, de los más de 30 proyectos con inversión extranjera propuestos, nueve han sido aprobados, cinco están constituidos y los demás están en el proceso de negociación.61
Voces críticas relacionan las dificultades en el campo cubano y la necesidad de importar alimentos con la falta de un mercado de tierra real y de propiedad privada. Consideran que la modernización y desarrollo de la agricultura en Cuba depende de la propiedad privada y libertad comercial ya que ello implicaría dar un valor correcto a la tierra y calcular en base a ello qué combinación de técnica y mano de obra puede maximizar su productividad. 62
El gobierno cubano, sin embargo, parece haber hecho excepciones con las inversiones provenientes de Rusia. Por ejemplo, el gobierno ha ofrecido a los inversores rusos inusuales concesiones para utilizar la tierra por plazos de 30 años, quedar exentos de aranceles de importación de determinadas tecnologías y poder repatriar sus beneficios.63 Desde 2020, el comercio entre Cuba y Rusia se ha incrementado en un 93% y las inversiones rusas se destinan a proyectos de transporte, turismo y producción de alimentos entre otros.
En relación a las inversiones estatales, entre 2013 y 2019 las inversiones en el sector agrícola han crecido un promedio del 4,8% anual.64 El objetivo de dichas inversiones ha sido el mejoramiento de las cadenas productivas de alimentos dirigidas al mejoramiento de las infraestructuras, la modernización e introducción de tecnologías.
Derechos de las mujeres a la tierra
Datos desagregados sobre el acceso de las mujeres a la tierra en Cuba disponibles online son escasos. Los últimos datos encontrados los ofrece el Informe Voluntario de Cuba sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas de 2021, según el cual el 32% de los propietarios de la tierra son mujeres (30.955) y el 16% de los usufructuarios de tierra son mujeres (44.027). 65
En Cuba las mujeres rurales han jugado un papel activo en diferentes actividades del sector agropecuario relacionadas principalmente con la producción de alimentos. Datos de 2019 indican que 353.313 mujeres campesinas trabajan en el sector agroalimentario, de éstas 342.730 se dedican a empresas agrícolas y 10.583 trabajan en el sector azucarero.66 En particular, el 20% de los miembros de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP) son mujeres y las brigadas de la Federación de Mujeres Cubanas-ANAP agrupan a 68.836 mujeres.67
Esta participación ha sido favorecida por las cooperativas de producción rurales. Según algunos estudios, las mujeres encontraron en dichas estructuras un espacio beneficioso debido a las mejores condiciones para acceder a recursos básicos como agua y electricidad, y ofrecían beneficios para la crianza de los niños y niñas y el acceso a nuevas tecnologías para la producción agrícola.68 En ellas, las mujeres también pudieron tener un papel innovador y de liderazgo. Por ejemplo, en la Cooperativa de Crédito y Servicio Abel Santamaría, en la provincia de Holguín, las mujeres lideraron iniciativas para la diversificación de la producción de nuevas especies de frijoles. Ello supuso también un empoderamiento de las mujeres que participaron (en mayor número que los hombres, 51%) en ferias de biodiversidad y se entrenaron en agricultura sostenible, conservación de alimentos, crianza ecológica de animales, entre otros.
En la actualidad, existen varias instituciones y programas destinados a fomentar la participación activa de las mujeres rurales. Uno de ellos es la Red de Organismos e Instituciones de Apoyo a la Mujer Rural creada en 1992 a instancias de la FAO.69 Junto con el Ministerio de Agricultura y organizaciones del sector agrícola, dicha Red ha organizado talleres y encuentros destinados al reconocimiento e intercambio de experiencias de las mujeres campesinas. El Ministerio de Agricultura aprobó una estrategia de género que se ha materializado, por ejemplo, en el proyecto de gestión de calidad con equidad de género para la seguridad alimentaria a nivel local IGECSA en cooperación con el PNUD y con el apoyo financiero de la Unión Europea y el Gobierno de Canadá.70 En 2016 se aprobó la Estrategia de Género del Sistema de la Agricultura (EG-SA) con el objetivo de orientar, incentivar y apoyar una gestión por la igualdad de derechos y oportunidades para mujeres y hombres a todos los niveles del sistema agrario.71 13 cooperativas tienen la certificación “Nos comprometemos con la Igualdad”, que implica un fortalecimiento de las capacidades para promover los derechos de las mujeres y el enfoque de género.72 La Asociación Cubana de Producción Animal (ACPA)73 y la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP) también tienen sus estrategias de género.
Sin embargo, a nivel subjetivo, las diferencias de género siguen presentes en Cuba. Estudios muestran que, desde la Revolución, el activismo de las mujeres cubanas consistió en contribuir a lograr los objetivos del movimiento revolucionario y del modelo socialista, más que en reivindicar sus derechos como mujeres con un movimiento autónomo y objetivos propios.75 Algunos autores señalan, que ello llevó a que no cambiara la subjetividad de los hombres en relación a las desigualdades de género y señalan que la sociedad cubana actual sigue caracterizándose por un marcado sesgo a nivel subjetivo presente en mayor medida en el sector rural.76
La participación de las mujeres en la toma de decisiones es en general baja aunque han existido diferencias dependiendo del tipo de tenencia de la tierra. Datos del año 2005 indican que la presencia de mujeres como presidentas es menor en las CCS (2,5%), donde los dueños de la tierra son campesinos individuales, que en las CPA (5,1%) donde la propiedad de la tierra es colectiva.77 En el mismo año, 266 mujeres, frente a 722 hombres, fueron dirigentes a nivel nacional de la ANAP.78 Desde entonces se ha producido un aumento. En 2017, 70.523 mujeres formaban parte de ANAP (el 18,4% del total) y de estas el 48% ocupaban cargos de dirección.79 Datos de 2009 también indican que las mujeres representaban el 57% de los presidentes de organizaciones de base y el 50% entre los miembros de las direcciones. 80
La Mula, Cuba, foto de Claudia Regina, Flickr, CC BY-SA 2.0
Para saber más
Sugerencias de la autora para saber más
El modelo socialista implantado en Cuba desde la Revolución Cubana en los años 50 ha determinado significativamente la gobernanza de la tierra en la isla. Los autores del artículo “Política Agraria y Desarrollo Rural en Cuba, el Sector Público de la Agricultura”, publicado en el Florida Journal of International Law, Maritza de la Caridad y Mc Cormack Bequer, repasan cómo ha evolucionado la política agraria cubana hasta la actualidad. Desde un punto de vista económico, Jaime Gabriel García-Ruiz analiza en su artículo “La renta del suelo en Cuba. La apropiación del excedente económico agropecuario”, publicado en la revista Estudios del Desarrollo Social en 2022, el mercado de tierra y rentabilidad del suelo en Cuba81 Las mujeres cubanas han jugado un papel importante en la producción de alimentos y seguridad alimentaria dentro de las estructuras del modelo socialista imperante en la isla, aunque las desigualdades de género persisten. El informe IGECSA Igualdad de Género para la Gestión con Calidad de la Seguridad Alimentaria: Documento Orientado para su Implementación presenta un modelo para insertar un sistema de gestión en igualdad de género en pequeñas y medianas entidades locales que intervienen en la seguridad alimentaria promovido por el gobierno cubano y el PNUD.82 Dos informes publicados en 2021 que dan visibilidad a la situación en general de las mujeres rurales en Cuba son Escenarios de políticas y desigualdades económicas en mujeres rurales en Cuba, publicado por Friedrich Ebert Stiftung,83 y Condición y posición de las mujeres rurales en Cuba.84 Para adquirir datos recientes y un conocimiento sobre la situación general en Cuba en relación con el sector rural y más allá, se recomienda el Informe Voluntario de Cubasobre los avances del país en relación a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas de 2021. 85
Línea de tiempo – hitos en la gobernanza de la tierra
1953-1959 – Revolución Cubana
El movimiento revolucionario liderado por el Che Guevara y Fidel Castro acabó con la dictadura militar de Fulgencio Batista e impondría un modelo socialista que, aunque últimamente flexibilizado, dura hasta la actualidad.
1959 – Primera reforma agraria
La primera reforma agraria se fundamentó en la creencia de que grandes empresas estatales debían liderar la producción agrícola por lo que no hubo una redistribución de la tierra sino que se priorizó nacionalizar las tierras de compañías extranjeras. Se dejaron 400 hectáreas a los latifundistas criollos.
1963 – Segunda reforma agraria
Esta reforma limitó a 67 hectáreas la propiedad afectando principalmente a la burguesía. El resto de tierras se nacionalizaron. Así, el 71% (7,8 millones de hectáreas) de las tierras agrícolas estaban en manos del Estado y 1,1 millones fueron para productores en condiciones desfavorables.86
1980s – Impulso a la producción de tabaco
En los años 80 se produjeron las primeras entregas de tierras de usufructo para la producción de tabaco a campesinos sin tierra o con muy poca tierra. Las parcelas se concedían en régimen de usufructo gratuito y por tiempo indefinido.
1993 – Reapertura del mercado libre agropecuario
La crisis que siguió a la desaparición de la Unión Soviética en 1991 conllevó a cambios estructurales en el sector rural en Cuba como la transformación de parte de la empresas estatales en Unidades Básicas de Producción Cooperativa (UBPC) y la reapertura del mercado libre agropecuario.
2008 – Legislación para el reparto de tierras ociosas en usufructo
A partir de este año se desarrollará legislación para la entrega de tierras ociosas en usufructo empezando con el Decreto Ley 259 de 2008 que permite la entrega de dichas tierras a productores individuales, a las cooperativas y a otras instituciones
2019 – Reforma de la Constitución
Por primera vez desde la Revolución Cubana se reconoce explícitamente en la Constitución la propiedad privada.
Referencias
[1] National Office of Statistics and Information (2022). Anuario Estadístico de Cuba 2022. Republic of Cuba.
[2] National Bureau of Statistics and Information (2012). Population and Housing Census 2012. Report on preliminary figures. Republic of Cuba.
[3] Aja Díaz, A. (2021). "Política de Población. Experiences from Cuba". Revista Novedades en Población. 17(33); Albizu-Campos Espiñeira, J. C. and Díaz-Briquets, S. (2023). "Cuba and emigration. Departure as a voice". Columbia Law School; Amerise, A. (2022). "Why Cuba's population has not exceeded 11 million for 25 years (and what the consequences are)". BBC Mundo.
[4] Mesa-Lago, C. (2020). Cuba: economic crisis, its causes, COVID-19 and rescue policies. Real Instituto El Cano.
[5] Echevarría, D. and Merlet, M. (2017). "Changes in Cuba's agrarian policy in the framework of the updating of its economic and social model". Cahiers d'Amérique Latine 84.
[6] Nova González, A. (2008). "El sector agropecuario en Cuba". Nueva Sociedad 216.
[7] Infobae. (2023). "El régimen cubano admitió la grave crisis económica que atravesa la isla debido a la escasez de alimentos y combustible"; Ministerio de Economía y Planificación.
[8] Niederstrasser, R. (2023). "New expropriation law in Cuba claims 'state interest'". Foreign Affairs Latin America.
[9] Echevarría, D. and Merlet, M. (2017). "Changes in Cuba's agrarian policy in the framework of the updating of its economic and social model". Cahiers d'Amérique Latine 84.
[10] Ibid.
[11] Ibid.
[12] Political Constitution of the Republic of Cuba (1976).
[13] Constitution of the Republic of Cuba (2019).
[14] Decree Law 259 on the delivery of idle land in usufruct (2008). [15] Ibid.
[16] Decree Law 300 on the handing over of idle state land in usufruct (2012).
[17] Decree Law 311 on the handing over of idle state land in usufruct (2013).
[18] Guerrero, D. (2017). "Cuba modifies policy for handing over land in usufruct". Cuba Debate.
[19] Decree Law 358 on the handing over of idle state land in usufruct (2018).
[20] Cuba 2021 National Voluntary Report. Sustainable Development Goals. United Nations.
[21] Constitution of the Republic of Cuba (2019).
[22] Decree Law 365 on Agricultural Cooperatives (2018).
[23] González, A. M. and Artiles Beltrán, J. L. (2016). "Agricultural credit and service cooperatives in Cuba". Civilizar Ciencias Sociales y Humanas 16(30).
[24] Ibid.
[25] Decree Law 365 on Agricultural Cooperatives (2018).
[26] Echevarría, D. and Merlet, M. (2017). "Changes in Cuba's agrarian policy in the framework of the updating of its economic and social model". Cahiers d'Amérique Latine 84.
[27] Ibid.
[28] Ministry of Science, Technology and Environment (2020). First Biennial Update Report to the United Nations Framework Convention on Climate Change 2020.
[29] Cuba 2021 National Voluntary Report. Sustainable Development Goals. United Nations.
[30] Ministry of Science, Technology and Environment (2020). First Biennial Update Report to the United Nations Framework Convention on Climate Change 2020.
[31] Cuba 2021 National Voluntary Report. Sustainable Development Goals. United Nations.
[32] Anaya Cruz, B. and García, A. (2023). "Necessary reflections on food security in Cuba". International Journal of Cuban Studies 15(1).
[33] Ministry of Science, Technology and Environment (2020). First Biennial Update Report to the United Nations Framework Convention on Climate Change 2020.
[34] Cuba 2021 National Voluntary Report. Sustainable Development Goals. United Nations.
[35] Ibid.
[36] Alonso Falcón, R. (2022). "What does the new legislation stipulate on the conservation, improvement and sustainable management of soils and the use of fertilisers?" Cuba Debate.
[37] Ibid.
[38] Blog Agricultura (2020). Cuba's most important agricultural crops / It was not possible to access the Anuario Estadístico de Cuba for official information.
[39] Ibid.
[40] Ministry of Science, Technology and Environment (2020). First Biennial Update Report to the United Nations Framework Convention on Climate Change 2020.
[41] Tamayo León, R. (2022). Cuban cattle farming has a great history and also the capacity to recover. Presidency and Government of Cuba.
[42] Sifonte Díaz, Y. J. and Carmona Tamayo, E. (2023). "Se busca: Relatos sobre el hurto y sacrificio del Ganado en Cuba (III)". CubaDebate. The above articles have figures from all over the country
[43] Cuba Debate (2014). "More than one and a half million hectares have been handed over in usufruct in Cuba (+ Gaceta)".
[44] Echevarría, D. and Merlet, M. (2017). "Changes in Cuba's agrarian policy in the framework of the updating of its economic and social model". Cahiers d'Amérique Latine 84.
[45] Ibid.
[46] Cuba Debate (2014). "More than one million hectares are idle in Cuba.
[47] Ministry of Science, Technology and Environment (2020). First Biennial Update Report to the United Nations Framework Convention on Climate Change 2020.
[48] Ibid.
[49] Index Mundi. Cuba - Protected areas.
[50] CubAhora (2019). Cuba's protected areas in figures.
[51] EcuRed. Protected areas of Cuba.
[52] World Bank. Urban land area (square kilometres) - Cuba / It was not possible to access the Anuario Estadístico de Cuba for official information.
[53] Núñez, R., Brown, J. and Smolka, M. (2000). Land as a resource to promote development in Cuba. Lincoln Institute of Land Policy.
[54] Ibid.
[55] Ibid.
[56] Ibid.
[57] World Tourism Organization (UNWTO). 145 Key Tourism Statistics.
[58] Ibid.
[59] Salinas Chávez, E., Salinas Chávez, E. and Mundet i Cerdan, L. (2019). "Tourism in Cuba: Development, Challenges and Perspectives". Rosa dos Ventos 11(1). Universidade de Caxias do Sul.
[60] Ibid.
[61] Ministry of Economy and Planning (2023). Agriculture has more than 30 projects with foreign investment.
[62] Cruz, R. (2022). "No land market, no food market in Cuba". Diario de Cuba.
[63] El Toque (2023). "Russian investments in Cuba: business and agreements since 2020".
[64] Cuba 2021 National Voluntary Report. Sustainable Development Goals. United Nations.
[65] Ibid.
[66] Permanent Mission of Cuba to the United Nations (2019). Note to the United Nations Entity for Gender Equality and the Empowerment of Women (UN-Women).
[67] Cuba 2021 National Voluntary Report. Sustainable Development Goals. United Nations.
[68] Arce-Rodríguez, M. B. (2012). "Women in Cuban agriculture: recovering an experience". Ra Ximhai 8(1).
[69] Permanent Mission of Cuba to the United Nations (2019). Note to the United Nations Entity for Gender Equality and the Empowerment of Women (UN-Women).
[70] IGECSA Gender Equality for Quality Food Security Management: Guidance for Implementation (2014).
[71] García Aguilar, M., Bombino Companioni, Y., Anaya Cruz, B. and Echevarría León, D. (2021). Condition and position of rural women in Cuba.
[72] Permanent Mission of Cuba to the United Nations (2019). Note to the United Nations Entity for Gender Equality and the Empowerment of Women (UN-Women).
[73] Contribution of the Cuban Association of Animal Production (ACPA) to the Report of Cuba to the Committee on the Elimination of All Forms of Discrimination against Women, CEDAW.
[74] Castañeda Pérez, I. (2007). Aproximación al Estudio de la Equidad de Género en la ANAP: Premisas para un Diagnóstico. Master's thesis. FLACSO. University of Havana.
[75] Arce-Rodríguez, M. B. (2012). "Women in Cuban agriculture: recovering an experience". Ra Ximhai 8(1).
[76] Ibid.
[77] Ibid.
[78] Ibid.
[79] Permanent Mission of Cuba to the United Nations (2019). Note to the United Nations Entity for Gender Equality and the Empowerment of Women (UN-Women).
[80] Ibid.
[81] García-Ruiz, J. G. (2022). "La renta del suelo en Cuba. The appropriation of the agricultural economic surplus". Estudios del Desarrollo Social 10(2).
[82] IGECSA Gender Equality for Quality Food Security Management: Guidance for Implementation (2014).
[83] Ramos Ojeda, D. et. al. (2021). Policy scenarios and economic inequalities in rural women in Cuba. Friedrich Ebert Stiftung.
[84] García Aguilar, M., Bombino Companioni, Y., Anaya Cruz, B. and Echevarría León, D. (2021). Condition and position of rural women in Cuba.
[85] Cuba 2021 National Voluntary Report. Sustainable Development Goals. United Nations.
[86] Echevarría, D. and Merlet, M. (2017). "Changes in Cuba's agrarian policy in the framework of the updating of its economic and social model". Cahiers d'Amérique Latine 84.