Este mes, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, propuso un nuevo proyecto de ley que promueve la minería, la agricultura ampliada y la producción de energía en tierras indígenas de la Amazonía. Por consiguiente, los promotores privados, así como los fondos de cobertura privados, ocuparán y desarrollarán las tierras que han sido el hogar de pueblos indígenas durante miles de años.
Mientras tanto, durante el primer año completo de Bolsonaro en el cargo, la deforestación aumentó en un 85%. Más información sobre este alucinante número a continuación.
Recientemente, ha habido varios desarrollos muy inquietantes en el Amazonas. Hace menos de dos meses, los principales científicos amazónicos del mundo, Thomas Lovejoy (de la universidad George Mason) y Carlos Nobre (de la universidad de Sao Paulo) emitieron una advertencia severa al mundo entero: “Hoy, estamos exactamente en un momento de destino: El punto de inflexión está aquí, es ahora” (Fuente: Amazon Tipping Point: Última oportunidad para actuar, Avances Científicos, vol. 5, no. 12, 20 de diciembre del 2019).
En la naturaleza, los puntos de inflexión son actos finales, es decir, son puntos sin retorno para los ecosistemas, ya que su funcionalidad se echa a perder. En cuanto a la inmensidad de la selva tropical amazónica, su función es tan poderosa que la pérdida es incomprensible y probablemente indicativa de un acto final inminente para la vida en el planeta, tanto para la civilizada como para la no civilizada.
Sin embargo, experimentando imprudentemente con un peligro extremadamente potente, el gobierno de Bolsonaro ignora la advertencia del punto de inflexión de los principales científicos, mientras la selva amazónica sufre un ataque directo en todos los frentes; es como un cruzada contra el cambio climático, en otras palabras, es limpiar el planeta de todas las formas de vida,con excepción del ser humano, pero eso solo puede durar mucho tiempo antes de que los “humanos golpeadores” comiencen a reverberar en todo el planeta.
Desde ya, el demorado impacto del calentamiento global antropogénico (causado por el hombre) a lo largo de décadas recién ahora ha comenzado a golpear el Amazonas con tres sequías de las que acontecían cada cien años, una tras otra, cada 5 años. No tiene precedente, nunca antes había sucedido, hasta que se acumularon niveles excesivos de CO2 en la atmósfera.
Según la NASA, los episodios graves, probablemente permanentes y dañinos de sequía en 2005, 2010 y 2015 han cambiado literalmente al Amazonas, perdiendo su especial “estado de sumidero de carbono”. Como tal, la esfera de influencia de la Amazonía en varias regiones de la selva tropical pasa de preservar a la humanidad a través de sus poderosas capacidades de “sumidero de carbono” a transformarse en un vergonzoso “emisor de carbono”, al igual que las centrales eléctricas a carbón que arrojan CO2, pero no tan ennegrecido.
Las sequías sin precedentes de una en cien años que ocurren cada cinco, envían una señal clara y rotunda al mundo de que algo está terriblemente mal.
Considere: según la NASA, el tiempo entre las sequías ha impedido la reposición. La selva tropical ya no reacciona como solía hacerlo. No tiene suficiente tiempo entre sequías para curarse y volver a crecer. A lo largo de toda la historia registrada, esto nunca se ha presenciado antes. Las implicaciones son francamente terribles. (Fuente: La NASA descubre que la sequía en el Amazonas deja un largo legado de daños, NASA Earth Science News Team, 9 de agosto, 2018)
Mientras tanto y lamentablemente, según el Instituto Nacional de Investigación Espacial de Brasil, la deforestación de la Amazonía aumentó un 85% en el 2019. Los corredores de bolsa de Wall Street matarían por acciones que aumentaran un 85% en un año, y no parpadearían por un momento, si es necesario, para lograr resultados tan espectaculares, lo que, en cierto sentido, es equivalente al escenario de deforestación del 85% de la Amazonía. Que probablemente empeorará en 2020.
No solo eso, la matanza de la población tribal indígena está en aumento a medida que los aventureros toman en serio los sentimientos derechistas de Bolsonaro, invadiendo el Amazonas. Están armados para defensa personal, así como para asaltar nuevas tierras. Uno nunca sabe cuándo un hombre semidesnudo descalzo que lleva una delgada lanza de madera puede aparecer detrás de un arbusto en su tierra sagrada.
Como si la situación no pudiera empeorar, ¡las perspectivas para 2020 son simplemente terribles! Según MapBiomas, una organización brasileña en colaboración con universidades, ONG y compañías tecnológicas que monitorean la deforestación: “Se esperaría que fuera peor que el año pasado a menos que ocurra algo realmente grande en los próximos dos o tres meses para evitar la alta temporada de deforestación que comienza en mayo (2020), según Tasso Azavedo, coordinador de un grupo llamado MapBiomas”. (Fuente: Victoria Klesty, La deforestación del Amazonas podría acelerar en 2020, Expert, Reuters, 15 de enero, 2020)
¿Qué es peor que el 85% de deforestación? Es el 100% o tal vez más ahora que Bolsonaro está tan ansioso por abrir el Amazonas a los impulsos profundamente arraigados del capitalismo neoliberal-neocolonial (1) privatizar (2) extraer (3) monetizar, tan rápido como sea humanamente posible, sin hacer preguntas.
En el futuro, suponiendo que el esquema de extracción de Bolsonaro para el Amazonas funcione según lo planeado y se apruebe en los sagrados pasillos del Congreso Nacional de Brasil (Brasilia), es probable que ponga en riesgo las características esenciales del Amazonas: sin su maravillosa fuerza y poder para generar (1) sistemas hidrológicos (ríos que cruzan el cielo hasta el norte de Iowa), (2) absorber y almacenar carbono (CO2) Y (3) un suministro milagroso de oxígeno sin fin, la civilización dejaría de existir más allá de tribus dispersas, aquí y allá.
En general, es obvio hacia dónde se dirige el asunto amazónico, especialmente considerando eso de la “civilización que deja de existir más allá de tribus dispersas, aquí y allá”.
Fortuitamente, la infraestructura para ese nuevo orden mundial ya está instalada. Hay 305 tribus brasileñas, con una población de 900 000, ya en situación de enseñar a la sociedad civilizada cómo actuar y comportarse y vivir en de ecosistemas naturales que sustentan fundamentalmente al planeta con recursos vitales… ¡gratis!
Postdata: Una excelente nueva película de ScientistisWarning.TV (Stuart Scott, Directo ejecutivo) “Rolbacks: un asalto contra la vida en la Tierra” es una exposición del ataque de Trump al medio ambiente.
El enlace: https://www.youtube.com/watch?v=vUWZZTu0GAM&feature=youtu.be
Traducción del inglés por Nicole Mosquera
Artículo original publicado en inglés en Counterpunch
Artícuo en español publicado en Pressenza